La vida de Cruz Salmerón Acosta estuvo signada por el tránsito doloroso de su enfermedad. Los apodos con los que aún lo conoce la gente de Manicuare —“poeta del martirio” y el “solitario de la cima de Manicuare”— van unidos a su obra y su propia existencia. Este poemario es una fe de vida, es su testimonio por ese transitar entre una esperanza de vida que se desvanece con el tiempo, la voluntad y la persistencia, desde lo más profundo de su alma, de aminorar su tormento a través del discurso poético. En este libro, que recoge sus poemas, se cruzan dos momentos cruciales en la obra de Salmerón Acosta: un ciclo “vital” y otro ciclo “amoroso”, así se obtiene una visión amplia de la búsqueda expresiva de un poeta que transitó entre el romanticismo y el modernismo, no tanto como una búsqueda estética sino como una forma de trascender el plano terrenal en el que la lepra lo devoraba.
Cruz Salmerón Acosta Poeta nacido en 1892 en El Guarataro —Península de Araya— y muerto en Manicuare, Sucre, en 1929. Fue colaborador de las publicaciones Satiricón, La U, Claros del Alba, Renacimiento, Élite, El Nuevo Diario y Broche de Oro. Se traslada de Cumaná a Caracas para estudiar en la Universidad Central de Venezuela, su estadía en la capital dura poco, al tiempo es diagnosticado con lepra y debe regresar a Cumaná. Durante su convalecencia dará forma a un conjunto de escritos que serán publicados póstumamente bajo el nombre de Fuente de amargura (1952).
Cruz Salmerón Acosta
Fuente de amargura
Colección Bicentenario Carabobo 53
ISBN 978-980-440-030-8
82 pp.