Usos y abusos del concepto de alienación

Tal es el peso que ha tenido el concepto de alienación, que prácticamente se incorporó al sentido común sin mayor conciencia de su significado, pensaba Federico Riu, quien se dio a la tarea de analizar los es­quemas teóricos implícitos en los usos que se le daban a dicha palabra al comienzo de la década de los 80 del siglo XX. Esos usos, a su parecer, se deslizaban fácilmente hacia el abuso en la medida en que con este término se pretendía mostrar que “las formas objetivas de la praxis social, en seme­jante tipo histórico de sociedad, no corresponden a la verdadera esencia del sujeto humano”. Ese desencuentro, señalaba Riu, se consideraba la característica más marcada de la sociedad contemporánea. “¿Quién no habla hoy de alienación? ¿Quién no se siente, en alguna forma, alienado?” se preguntaba antes de señalar que esa condición se asumía “acríticamente como un fenómeno objetivo, claro y evidente por sí mismo”. Es así que dedica este libro a revisar los planteamientos de los principales exponentes de una visión que enjuicia a la sociedad capitalista como un sistema enajenante que termina por extrañas a los humanos de su propio ser. Por el filo de su crítica pasan Marx, Sartre, Lukács, Sartre, Heller, Merton, Marcuse, entre otras figuras de renombre. Publicado en 1981, este libro trata de mostrar que la validez teórica del concepto es endeble, sino nula.

Federico Riu

Filósofo, docente y ensayista venezolano nacido en 1925 en Lérida, España, de donde se autoexilió. Llegó a Venezuela en 1947 y trabajó como maestro en Trujillo y en El Junquito. En 1954, se graduó summa cum laude en la Escuela de Filosofía de la UCV, de la que sería profesor durante 25 años e incluso director. Completó su formación en Friburgo, Alemania. Es autor de Ontología del siglo XX: Husserl, Hartmann, Heidegger y Sartre (1966); Historia y totalidad: el concepto de reificación en Lukács (1968); Ensayos sobre Sartre (1968); Tres fundamentaciones del marxismo (Caracas 1976), y Vida e historia de Ortega y Gasset (1985). Murió en Caracas en 1985.

Federico Riu
Usos y abusos del concepto de alienación
Colección Bicentenario Carabobo 118
ISBN 978-980-440-084-1
140 pp.

El Osario de Dios

Los 158 relatos que componen este libro son la expresión definitiva de una poética de la brevedad. Escritos que convergen, que vuelven a ser revisitados por el lector; personajes y acciones que parecen complementarse, a pesar de su aparente autonomía. Entre el habla coloquial, la magia, el humor y el lirismo hay una resonancia —quizás anecdótica— que recuerda un poco la monotonía de los caseríos. No es casual que Clarines (población del estado Anzoátegui) sea el centro de algunas de las narraciones de este libro, pero entre tanta uniformidad sobresalen la historia y la geografía, la oralidad y la circularidad de las guerras como tema dominante. Es acá donde se despliega lo maravilloso y donde se refunda la ficción como el fuego necesario que revitaliza la realidad. Hay una persistencia en rescatar a seres desplazados, trashumantes, y a criaturas muy cercanas al mito, con un profundo arraigo desde lo popular.

Alfredo Armas Alfonzo Escritor, periodista y editor nacido en Clarines, Anzoátegui, en 1921. Colaboró en varios diarios y revistas como El PaísEl NacionalÉlite y El Heraldo. Fundó la revista Figuras y dirigió las publicaciones Nosotros y El Farol. Premio Nacional de Literatura en 1970. En la década de 1960, fue director de Cultura de la Universidad de Oriente; en 1970, vicepresidente del Inciba, y en 1980 dirigió la editorial Equinoccio, de la Universidad Simón Bolívar. Entre sus obras se destacan Los cielos de la muerte (1949); La cresta del cangrejo (1951); Los lamederos del diablo (1956); Diseño gráfico en Venezuela (1985) y Los desiertos del ángel (1990). Murió en Caracas en 1990.

Alfredo Armas Alfonzo Escritor, periodista y editor nacido en Clarines, Anzoátegui, en 1921. Colaboró en varios diarios y revistas como El PaísEl NacionalÉlite y El Heraldo. Fundó la revista Figuras y dirigió las publicaciones Nosotros y El Farol. Premio Nacional de Literatura en 1970. En la década de 1960, fue director de Cultura de la Universidad de Oriente; en 1970, vicepresidente del Inciba, y en 1980 dirigió la editorial Equinoccio, de la Universidad Simón Bolívar. Entre sus obras se destacan Los cielos de la muerte (1949); La cresta del cangrejo (1951); Los lamederos del diablo (1956); Diseño gráfico en Venezuela (1985) y Los desiertos del ángel (1990). Murió en Caracas en 1990.

Alfredo Armas Alfonzo
El Osario de Dios
Colección Bicentenario Carabobo 117
ISBN 978-980-440-108-4
232 pp.

Abrapalabra

En esta novela se dan cita pícaros, recolectores de basura, locos y artistas. Tal pluralidad de mundos, que aparecen en constante fragmentación, funciona para que el lenguaje y los personajes logren establecer procesos de comunicación. La obra, a ojos del lector, pasa a convertirse en dos formas que niegan los extremos para fijarse más en el fondo, es decir, más que en la manera de narrar, acá lo novedoso es la superposición textual y los planos históricos que posibilitan la compresión de la novela. La cultura, la historia, la realidad política y el habla venezolana se interpelan —y al mismo tiempo, se (de)construyen— como forma totalizante y novedosa. Cuatro historias centrales mantienen la verticalidad de la novela. Sin embargo, hay otras “subhistorias” que reclaman ser contadas. Es así que entre lo subyacente y el texto principal, el autor propone una estrategia fragmentaria, mudable y, acaso, no fija del propio relato.

Luis Britto García Narrador, ensayista, poeta, humorista, dramaturgo, fotógrafo, abogado y profesor universitario. Nacido en Caracas en 1940, inicia su prolífica carrera profesional como caricaturista para más tarde colaborar con publicaciones de carácter político. Escribe para El NacionalClarín y La Pava Macha. En la década de 1970, obtiene en dos oportunidades el Premio Casa de las Américas con sus obras Rajatabla (1970) y Abrapalabra (1979). Es autor de más de sesenta obras. Premio Nacional de Literatura (2002) Entre sus libros se destacan Los fugitivos y otros cuentos (1964); Vela de armas (1970); La orgía imaginaria (1984); El imperio contracultural: del rock a la postmodernidad (1991); Golpe de gracia (2001).

Luis Britto García
Abrapalabra
Colección Bicentenario Carabobo 116
ISBN 978-980-440-078-0
746 pp.

Espiritualidad y literatura: una relación tormentosa

La relación entre mito, literatura, espiritualidad y lenguaje es un eje transversal en esta obra ensayística de Juan Liscano, como parte de un intento por identificar cuál es el papel del arte en la época moderna, donde la banalización del capitalismo amenaza con devorar la esencia de lo trascendente. Observa en la literatura, al igual que en el mito, una oportunidad de intermediación entre “un más allá y un más acá”, al crear realizaciones simbólicas, arquetipales, muy cercanas a la experiencia de la espiritualidad, pues avivan el sentido de lo intemporal. A la vez, reconoce en el arte su carácter revolucionario, capaz de desenmascarar, denunciar, para los individuos las trampas de la sociedad.

En este sentido, a Liscano le interesa cómo el artista del siglo XX retoma estas nociones y las expresa en su obra, sus ensayos sobre Gallegos, Rimbaud, Hesse, D. H. Lawrence, entre otros —además de poner en evidencia sus destacadas cualidades como crítico literario—, examinan la búsqueda de estos autores por la realización interior. A través de estas páginas el lector podrá apreciar la profundidad y lucidez de las inquietudes intelectuales de Liscano, así como la claridad de sus conclusiones acerca del acto de escribir.

Juan Liscano Poeta, ensayista y crítico de arte nacido en Caracas en 1915. Formó parte, entre otros, del grupo literario Viernes. También, fundó y dirigió varias revistas, como Zona Franca, y suplementos culturales como el Papel Literario de El Nacional. Fue director de Monte Ávila Editores e individuo de número de la Academia Venezolana de la Lengua. Recibió el Premio Municipal de Poesía en 1943 y el Premio Nacional de Literatura en 1950. Falleció en Caracas en 2001.  Algunas de sus obras más reconocidas son: Nuevo Mundo Orinoco (1959), Panorama de la literatura venezolana actual (1973),Los fuegos apagados (1990) y Nuevas tecnologías y capitalismo salvaje (1995).

Juan Liscano
Espiritualidad y literatura: una relación tormentosa
Colección Bicentenario Carabobo 115
ISBN 978-980-440-107-7
227 pp.

Mis otros Fantoches

Los dieciséis cuentos que reúne este libro tienen un hondo sabor nativo. Son paisajes, o cuadros, que reflejan el sentimiento del venezolano, sus tristezas y carencias, su tragedia y sus continuos avatares. Sin embargo, la escritura de Leo —el “Dibujante del pueblo venezolano”, como lo llamara Aquiles Nazoa— puede subvertir este orden al ofrecer aquello que, entre tanta ternura, el propio autor supo contener más que nadie: el humor. Personajes picarescos en los cuales se distinguen algunos indicios de una venezolanidad inquieta, movediza, que intenta de alguna manera superar sus propias adversidades, por ejemplo, a través de la música o el carnaval. Vida y obra se confunden en este autor; se percibe que muchas de las anécdotas que dan vida a los relatos son recreaciones de lo que le rodea. Cabe preguntarse hasta qué punto, Leoncio Martínez debió mantener su generoso y esforzado ánimo para no caer en las situaciones de sus propias creaciones. Lo cierto es que a través de sus cuentos podemos apreciar su particular mundo, como si viéramos el pasado caraqueño por el agujero de una cerradura.

Leoncio Martínez, Leo Humorista, dramaturgo, poeta, narrador, publicista, periodista y caricaturista nacido en Caracas en 1888. Fue el principal promotor de la creación del Círculo de Bellas Artes (1912). Redactor de El Cojo Ilustrado, La Voz del Pueblo, El Nuevo Diario, Pitorreos y La Linterna Mágica. Junto a Francisco Pimentel (Job Pim) funda, en 1923, el semanario Fantoches del que fuera director y figura principal hasta su muerte. Decorador de obras de teatro, también escribió sainetes y zarzuelas, entre la que sobresale Alma llanera.Asimismo, fue compositor de canciones populares, como Dama antañona. En varias oportunidades, estuvo prisionero durante los gobiernos de Juan Vicente Gómez y Eleazar López Contreras. Murió en Caracas en 1941. Entre sus obras destacan El salto atrás (1925); Fantoches pascuales: almanaque humorístico y literario (1934); Poesías (1943), y Los dibujos de Leo (1959).

Leoncio Martínez
Mis otros Fantoches
Colección Bicentenario Carabobo 114
ISBN 978-980-440-104-6
164 pp.

Acto cultural

En plena época gomecista, en un pueblo de Ejido (estado Mérida), se realiza una velada que tiene por objetivo conmemorar los cincuenta años de la Sociedad Louis Pasteur, organizada por su junta directiva. Han decidido representar la obra “Colón, Cristóbal: Un genovés alucinado”. La risa incómoda de seis actores de inocultable talento es el comienzo de Acto cultural, texto que José Ignacio Cabrujas escribió en 1976 y en el que describe las carencias de seis personajes —Lucrecia, Cosme, Francisco Javier, Amadeo, Antonieta y Purificación Chocano— mientras actúan en la obra. Todo lo anterior funcionará como un escenario (dentro de otro escenario) que intenta demostrar cómo la epopeya de Colón es similar al descubrimiento del pueblo de San Rafael, lugar en donde se realiza el acto cultural. El discurso grandilocuente que da inicio a la actividad servirá para mostrar las privaciones de cada uno de estos personajes: Herminia se desvive recordando a su difunto marido; Cosme se pierde en su libido; Purificación evidencia la ausencia de su padre y la falta de reconocimiento por parte de la madre; Francisco Xavier se ahoga en su realidad de reuniones, pautas y actas, y Amadeo no puede dejar de evocar su fracaso marital.

José Ignacio Cabrujas Dramaturgo, actor, escritor de telenovelas, publicista y profesor universitario nacido en Caracas en 1937. Es uno de los intelectuales más representativos de la Venezuela contemporánea. Junto a Isaac Chocrón y Román Chalbaud llegaron a ser conocidos como la “Santísima Trinidad del Teatro”. Fue colaborador de El Nacional, El Diario de Caracas y El Sádico Ilustrado, en donde revela su agudo ingenio y una extraordinaria capacidad para el humor y la sátira política. Sus artículos fueron reunidos en El país según Cabrujas (1992). Entre sus obras de teatro se destacan Los insurgentes (1961); El día que me quieras (1971); Profundo (1972) y El americano ilustrado (1986). Murió en Porlamar, Margarita, en 1995.

José Ignacio Cabrujas
Acto cultural
Colección Bicentenario Carabobo 113
ISBN 978-980-440-103-9
80 pp.

La ciencia amena  

La ciencia amena Acucioso periodista, lector voraz, Arístides Bastidas entendía, como eje de su desempeño periodístico en el campo de la ciencia, su labor divulgadora, pues se debe “llevar claridad a donde existe confusión y llamar las cosas por el nombre con el que la conoce el pueblo”. Títulos como “El hombre atómico debiera aprender de Trucutú”, “Los monos no practican la discriminación racial” y “La materia viva y la materia inerte son harina del mismo costal” —algunas de sus columnas publicadas en El Nacional compiladas en este libro—dejan ver cómo Bastidas por décadas expresó con un lenguaje sencillo y un humor audaz, mucho del saber reservado para un limitado número de estudiosos y académicos. Evolución, robótica, petróleo, demografía, medicina, son algunas de las disciplinas sobre los que estos artículos, además de aportar un grano de saber, tratan de vislumbrar cuál es el papel del ser humano en su contexto, en su dimensión social, pues su progreso en la Tierra ha incidido enormemente en las dinámicas de la naturaleza, en especial, en los últimos siglos. Por consiguiente, la intención didáctica de La ciencia amena se fundamenta en convertir este conocimiento en una herramienta para la autodeterminación, el desarrollo y la cultura del pueblo.

Arístides Bastidas Nacido en San Pablo, Yaracuy, en 1924 fue un pionero del periodismo científico en Iberoamérica. Desde su columna “La ciencia amena” —que publicó en El Nacional desde 1971 hasta su muerte—, abordó ese saber con un estilo divulgativo, interpretativo y de opinión. Recibió reconocimientos por la Unesco y fue galardonado con el Premio Nacional de Periodismo. Publicó más de una veintena de libros, entre otros, El átomo y sus intimidadesCientíficos del mundoCiencia y tecnología, dos bienes sociales y La Tierra, morada de la vida y el hombre. Falleció en Caracas en 1992.

Arístides Bastidas
La ciencia amena 
Colección Bicentenario Carabobo 112
ISBN 978-980-440-100-8
314 pp.