La República Bolivariana de Venezuela estuvo presente desde el 25 de abril hasta el 11 de mayo en la Feria Internacional del Libro de Bogotá (FilBo 2025), donde cautivó con su producción editorial exhibida a través del Ministerio del Poder Popular para la Cultura y su embajada en este país.
En este evento, organizado por la Cámara Colombiana del Libro y Corferias, el país ofreció en su stand más de 400 títulos publicados por más de una decena de editoriales, incluyendo las adscritas al Ministerio del Poder Popular para la Cultura.
Lectores colombianos y visitantes en general pudieron encontrar ediciones de Monte Ávila, El perro y la rana, Biblioteca Ayacucho, Vadell Hermanos, Fundarte, Trinchera, Centro de Estudios Simon Bolívar, Acirema, Ediciones La letra que falta, Garzamora y Nila ediciones, entre otros sellos editoriales.
Destacados autores venezolanos conectaron en la FilBo con diferentes lectores, quienes descubrieron la producción editorial para adultos, jóvenes y niños que se está creando en Venezuela. La delegación estuvo integrada por autores como el comunicador y filósofo Miguel Pérez Pirela, la investigadora afrovenezolana Casimira Monasterios, quien es militante del Movimiento Social Afrovenezolano y diputada a la Asamblea Nacional; el historiador y ensayista Manuel Carrero y la comunicadora colombovenezolana Aminta Beleño.
Se sumó a la delegación una representación de Fundarte, con la presidenta de esta institución, Andrymar Montilla, y su coordinadora de Producción, Rosa Fernández. Esta institución de la Alcaldía de Caracas presentó sus publicaciones como la colección Yo misma fui mi ruta y la Biblioteca Stefania Mosca.
En el stand de Venezuela se se exhibieron obras de diferentes géneros que exploran temas históricos y la rica herencia cultural de Venezuela entre otros aspectos.
Entre los títulos más solicitados se encuentran “Pueblo” y “Happy” de Miguel Pérez Pirela y “Doña Bárbara” de Rómulo Gallegos.
Otros títulos más buscados fueron “La República Parricida” de Pedro Calzadilla, “Parto de Pueblo Cimarrón” de Casimira Monasterios, “Cine en Clave Ecofeminista” de Aminta Beleño, “La Campaña Libertadora del Perú” de Escala y Maita, “África y Afrodescendientes en las Américas y el Caribe” de Jesús García, “Afrodescendientes: Festejando entre Dioses y Espíritus” de Diógenes Díaz, “Ciencia Ficción Venezolana” de Julio Miranda, “Cimarronaje Cultural” de Gustavo Silva y “Entre Que Caben Cien” de Angel Méndez.
En el marco de la 37.ª Feria internacional del Libro de Bogotá (FilBo 2025) se llevó a cabo la presentación de la colección “Yo misma fui mi ruta” del fondo editorial Fundarte, la cual reúne el trabajo poético de escritoras venezolanas.
La colección pretende contribuir a la creación de un espacio de publicación duradero para la escritura de mujeres, dando respuesta a la necesidad apremiante de visibilizar y dar cabida a la escritura que han hecho las mujeres en un circuito literario que siempre ha estado dominado por el canon patriarcal.
No se considera que exista una literatura “femenina”; por el contrario, es fundamental señalar las voces de las mujeres en editoriales, premios, programas de estudio y jurados, así como la propia existencia de la obra dentro del códice de estas autoras.
Las plaquettes de “Yo misma fui mi ruta” ofrecen poesía de la región y del país cuidando la calidad de las obras y dando cabida tanto a poetas con trayectoria como a nuevas voces.
El nombre de la colección rinde homenaje a la poeta Julia de Burgos, símbolo de la lucha y la resistencia de las mujeres en la literatura.
Durante la presentación, poetas hermanas de Colombia, como Sthefany Rojas Wagner, Martha Quiñones y Luisa Villa, realizaron una lectura sentida de la poesía de las escritoras venezolanas que conforman esta colección.
Cada una de estas escritoras no solo es una voz poética sino también activistas y defensoras de los derechos de las mujeres, además de editoras comprometidas con la difusión de la poesía latinoamericana.
La colección “Yo misma fui mi ruta” se establece como un espacio vital para la creatividad y circulación de la poesía escrita por mujeres, contribuyendo a la equidad en el ámbito literario y celebrando la riqueza de la diversidad en la literatura contemporánea.
En el marco de la Feria Internacional del Libro de Bogotá (FilBo) 2025, efectuada hasta este 11 de mayo, se llevó a cabo en el stand de Venezuela un emotivo homenaje a la escritora venezolana Stefania Mosca en el que se destacó la importancia del premio nacional de literatura que lleva su nombre, organizado por la Alcaldía de Caracas a través de Fundarte.
La actividad estuvo a cargo de la presidenta de Fundarte, Andrymar Montilla, y Rosa Fernández, coordinadora de Producción en esta institución.
El Premio Stefania Mosca, creado en 2010, es un faro para la literatura venezolana, en el sentido de dar la posibilidad de que autores ya consagrados como nuevas voces pudieran enviar obras en las cuatro categorías: narrativa, ensayo, poesía y crónica.
“Este año celebramos la 16.ª edición del premio; pues los participantes, en el marco del concurso anual, envían sus obras, en las cuatro categorías”, sostuvo Montilla.
La escritora Stefania Mosca representa un costado emblemático en la literatura venezolana, y su carrera abarcó múltiples géneros.
“Las obras de los ganadores del premio, publicadas y presentadas, mantienen el legado”, apuntó Montilla.
Stefania Mosca, escritora y gestora cultural venezolana, trabajó con temas relacionados con la identidad, la maternidad y la vida cotidiana.
Colección Biblioteca Stefania Mosca de Fundarte
“Borges: Utopía y realidad” forma parte de la colección. Es una nueva edición de un libro de Stefania Mosca que explora la imaginación ficticia de Jorge Luis Borges, incitando a sus lectores a sumergirse en su mundo y sus Utopías.
“El suplicio de los tiempos” es otro título. Primera recopilación de ensayos de “Tres tiempos”, donde Mosca reflexiona sobre la tradición y todo lo relacionado con la realidad contemporánea, y temas como la memoria y la naturaleza, pero también la realidad del realismo.
Igualmente incluida en la colección “La memoria y el olvido”, de modo que se complementa la oferta literaria con la que no se pueden quedar “con las ganas”.
Además también es parte de esta colección el libro Seres cotidianos es el número cuatro de la Biblioteca Stefania Mosca, publicada por el Fondo Editorial de Fundarte, que busca divulgar la obra de esta extraordinaria escritora. En este libro la autora presenta un paisaje interior, un monólogo interior constante con ella misma. Se manifiesta desde su soledad contemplativa, además los personajes se confrontan con ellos mismos. Increpan un universo con heridas. Se recuerdan desde los lugares más extraños con historias que se descubren en las noches.
La colección Biblioteca Stefania Mosca, que consta de cuatro libros hasta el momento, es testimonio del impacto de Mosca en el ámbito literario, afirmó Montilla.
Otro libro de Stefanía Mosca
Uno de sus libros más relevantes, Maternidad, narra su vivencia como madre joven, ofreciendo una visión importante para las generaciones más jóvenes.
“Stefania transmite su camino emocional, desde la carrera de su barriga hasta la llegada de la madre con la que se cruzó. El libro es un mapa para las jóvenes, facilitando recomendaciones y reflexiones sobre maternidad y vida”, dijo Rosa Fernández.
“Stefania fue un tornado de creatividad y trabajo, y su legado inspira a las nuevas generaciones de escritores”, concluyó Fernández.
La República Bolivariana de Venezuela dice presente por tercera vez de forma consecutiva en la 36.ª Feria Internacional del Libro de Teherán, en la República Islámica de Irán.
El evento se lleva a cabo en la Gran Mezquita de la capital iraní, desde su inauguración el pasado 7 de mayo hasta el 17 de este mes, bajo el lema Leamos por Irán y con Irak como país invitado.
Venezuela, que participa a través de su Ministerio del Poder Popular para la Cultura (Mppc) y su embajada en Irán, ofrece en su stand más de 90 publicaciones de editoriales públicas, privadas e independientes.
La oferta editorial incluye títulos de El perro y la rana, Monte Ávila y Biblioteca Ayacucho, adscritas al Mppc, y de otras casas editoras y fondos editoriales, como el Instituto de Altos Estudios Hugo Chávez Frías y Vadell Hermanos Editores.
Además de decir presente en la Feria Internacional del Libro de Teherán, Venezuela igualmente participó durante el presente año por primera vez en la 39.ª Feria Internacional del Libro de Túnez y por segunda vez en la 56.ª Feria Internacional del Libro de El Cairo, en Egipto, como parte de su relación significativa con los países árabes en lo diplomático y cultural.
También Venezuela asistió a la 37.ª Feria Internacional del Libro de Bogotá (Filbo), en Colombia, que finaliza este 11 de mayo, donde ofreció desde el pasado 25 de abril una importante muestra de su producción literaria.
Asimismo, acudió en febrero con una nutrida delegación de escritores y más de 30 actividades literarias a la 33.ª Feria Internacional del Libro de La Habana, Cuba.
La presencia del país en las ferias internacionales del libro reafirma el interés y compromiso del Gobierno Bolivariano en la promoción de la producción editorial nacional, sus autores y políticas para fomentar la lectura de cara al mundo.
La revista Libertador Ocho Estrellas se ha consolidado como un referente en la divulgación de temas relacionados con la vida y obra de Simón Bolívar.
En la 37.ª Feria Internacional del Libro de Bogotá (FilBo) se presentó esta publicación periódica del Centro de Estudios Simón Bolívar junto a la Colección Bicentenario Junín-Ayacucho con la participación del escritor e historiador Manuel Carrero.
El público pudo apreciar diversas ediciones de la revista, la cual recoge artículos de diferentes autores que dan cuenta, entre otros, de los aspectos más relevantes del legado del Libertador, su papel en la independencia de Hispanoamérica y su participación en la construcción de identidades nacionales.
Uno de los números exhibe el retrato de Bolívar en una de las etapas más significativas de su trayectoria: la Campaña Admirable de 1813, realizado por el célebre pintor venezolano Arturo Michelena.
“El 6 de agosto de 1813 el Libertador cumplió la Campaña de la Arena y a partir de Cúcuta desarrolló la Campaña Admirable en su victoriosa Caracas”, resaltó Carrero.
Apuntó que la historia no es más que un relato de hechos pasados, situaciones de las cuales se trata de extraer una experiencia con la que los hombres pueden entender su presente y cambiar el futuro.
Esta exposición fue la ocasión para profundizar en una enriquecedora sesión de preguntas y respuestas que abarcó la importancia del legado que dejó Bolívar, el papel que desempeña la mujer en la historia de la prensa o cómo las revistas pueden servir de vehículos para la cultura y la educación.
Los participantes también pudieron obtener un ejemplar gratuito de la revista.
La importancia de la revista
La revista Libertador Ocho Estrellas no solo es un medio de comunicación; es un espacio para la reflexión y el análisis crítico. En un mundo donde la información circula rápidamente, la necesidad de publicaciones que ofrezcan contenido de calidad se vuelve esencial, afirmó Carrero.
“La revista es un género del mundo de la imprenta, diferente a un libro, con una nota distintiva: es variada y contiene diversos temas”, añadió.
A través de la publicación de investigaciones y artículos revisados por pares, la revista Libertador Ocho Estrellas contribuye a la creación de un registro histórico y científico que es vital para el avance del conocimiento.
Esto es especialmente relevante en el contexto actual, donde la ciencia y la cultura enfrentan desafíos significativos.
“La revista se posiciona como un referente en el ámbito académico, no solo en Venezuela, sino en toda América Latina”, concluyó Carrero.
Colección Bicentenario Junín-Ayacucho
Por otra parte, la colección Bicentenario de Junín y Ayacucho reúne ocho volúmenes con un conjunto de autores que tienen como bisagra el análisis, sus personajes más destacados, los hombres que participaron y su origen.
Con esta colección los lectores pueden tener una idea sobre la relevancia de estas dos batallas. Con la victoria de estas batallas se obtiene el fin de la guerra y la independencia del dominio colonial español sobre América, subrayó Carrero.
“El estoicismo de muchos hombres al enfrentarse no solo a los enemigos con sus armas casi artesanales sino a los excesos del clima contra una vestimenta casi precaria”, expuso Carrero.
Estos hombres no tienen nada que envidiarle a los espartanos o aquellos hombres que ganaron las Galias. Junín y Ayacucho es la muestra del esfuerzo americano por darle una independencia total.
“En estos libros el lector encontrará la vida de Sucre, el listado de hombres que participaron y de qué países provenían. Textos de escritores venezolanos, peruanos, ecuatorianos entre otros”, enfatizó Carrero.
La inauguración de la 39.ª Feria Internacional del Libro de Túnez (FilT) se llevó a cabo el pasado 25 de abril y Venezuela, país que participó por primera vez, se convirtió en la única representación del continente americano en este importante evento editorial.
El acto inaugural contó con la asistencia del presidente de la República Tunecina, Kaïs Saïed, quien realizó un recorrido por el parque de exposiciones de Le Kram, lugar del evento. El primer mandatario tunecino dejó para el final de su recorrido de la feria la visita al estand de Venezuela con la esperanza de darle la bienvenida a la delegación venezolana; sin embargo, el encuentro no ocurrió ya que el vuelo donde viajaba esta última debió ser reprogramado debido a que el día anterior hubo un terremoto en Estambul, Turquía.
La delegación venezolana llegó a la cita con una oferta editorial de más de trescientos títulos, parte de la producción más reciente de las editoriales del Estado venezolano: Fundación Editorial El perro y la rana, Monte Ávila Editores y Biblioteca Ayacucho.
Otros títulos que formaron parte de la oferta venezolana para el público lector tunecino incluyeron ediciones de Hermanos Vadell Editores, La Fundación para la Cultura y las Artes (Fundarte) de la Alcaldía de Caracas, Centro de Estudios Simón Bolívar y Editorial Garzamora.
De los títulos venezolanos que estuvieron disponibles en Túnez se destacaron ‘El mar que me regalas’, la última novela de Jorge Rodríguez Gómez; ‘Pirata’ y ‘Narrar es un placer’ de Luis Britto García; ‘Happy’ y ‘Pueblo’ de Miguel Ángel Pérez Pirela y ‘Zona de Tolerancia’ y ‘La caja de los truenos’ de Benito Yrady.
Autores venezolanos al encuentro de los lectores tunecinos
Tres importantes autores venezolanos acompañaron el debut de Venezuela en la feria del libro tunecina: Luis Britto García, prolífico escritor ganador del Premio Nacional de Literatura; Carmen Bohórquez, filósofa e historiadora, y considerada actualmente como la primera autoridad sobre la figura de Francisco de Miranda; y Antonio Trujillo, poeta y cronista, director de la Revista Nacional de Cultura y Premio Nacional de Cultura, mención Literatura 2023-2024.
Britto García inició su participación en la feria con la presentación de la nueva edición de ‘Pirata’, una publicación de Monte Ávila Editores. Según las propias palabras de Britto durante la presentación: “El libro surge de mi largo estudio de los muchos años de batallas entre Venezuela y los piratas, eso me llevó al tema específico de la novela”.
El escritor volvió a compartir con los lectores asistentes a la feria durante una mesa redonda sobre el plagio, la piratería científica y los desafíos que plantea la Inteligencia Artificial. Más tarde Britto García, junto a Raúl Cazal, viceministro de Cultura y presidente del Centro Nacional del Libro de Venezuela, indagaron en el panorama actual de la novela venezolana durante un coloquio en el que resaltaron las obras recientes de autores venezolanos, muchas de las cuales estuvieron disponibles durante la feria para el público asistente.
Por su parte, la historiadora Carmen Bohórquez tuvo la oportunidad de compartir con el público asistente a la feria en un coloquio en torno a la figura de Francisco de Miranda, sobre quien ha escrito extensamente durante su carrera.
Para el público tunecino estuvieron disponibles las ediciones de los tomos XXI y XXII de la colección Colombeia, Archivo del General Francisco de Miranda, obras de gran importancia histórica y patrimonial para el rescate y preservación de la memoria de este personaje clave en la formación de la gesta independentista en América.
Bohórquez también tuvo oportunidad de indagar en otro de sus títulos, ‘Miranda en el Congreso Constituyente de 1811’, en el que la historiadora analiza las diez primeras sesiones de ese congreso donde Miranda intervino en al menos veinte ocasiones. “Ningún otro diputado, a excepción de Miranda, alegaba a favor de ese paso que iban a dar, el genocidio por parte de la corona española y el aprovechamiento de nuestras riquezas”, destacó.
La historiadora venezolana también participó en el coloquio ‘La transversalización de género en el libro y la diplomacia cultural’, donde aprovechó para llamar la atención sobre el ejercicio actual de la diplomacia que “muestra solo algunas facetas de un país al exterior, y da la espalda a otras. En muchos casos invisibilizando aspectos culturales esenciales de una nación. Una diplomacia para gente con dinero y privilegios, esa diplomacia solo sirve a intereses particulares. No deberíamos llamarle ni siquiera diplomacia”, expresó.
Por otro lado, la poesía tuvo un embajador destacado en la figura de Antonio Trujillo, quien utilizó su libro ‘El mago de la vuelta de los mangos’ como punto de partida para iniciar un coloquio sobre literatura oral para niñas, niños y jóvenes. Durante la actividad, Trujillo elaboró respecto a su relato en el que el trabajo de un artesano ebanista nos abre las puertas a un mundo que celebra la contemplación como un motor de vida.
Trujillo también condujo una conferencia magistral en torno al tema de la Revista Nacional de Cultura de Venezuela. Durante la actividad el poeta recalcó la importancia de las publicaciones periódicas, sobre todo en lo relacionado a la capacidad que tienen estas en contener parte importante de la memoria cultural de un país.
“Hay una cantidad invaluable de trabajos y obras, que se publicaron en revistas de toda índole, que hoy en día sirven como fuente inagotable para cultores, investigadores y autores en general”, añadió.
Finalmente Britto García y Bohórquez tuvieron la oportunidad de compartir con una porción mayor del público tunecino gracias a la participación de ambos en programas radiales difundidos a través de la Radio Tunis Chaine Internationale RTCI, una estación de radio nacional.
De vuelta a la universidad
Las actividades de Venezuela en Túnez no se limitaron a la participación en la feria del libro. Durante la estancia en la capital tunecina la delegación venezolana tuvo la oportunidad de compartir con profesores y estudiantes de la Facultad de Letras de la Universidad de la Manouba.
Durante el encuentro se realizó la donación de un centenar de títulos al departamento de Filología Española de esa casa de estudios, el director de ese departamento, Rhida Mami, recibió los libros publicados por editoriales del Estado venezolano.
La selección de títulos incluye trabajos clásicos de la literatura venezolana de autores como Teresa de la Parra, Rómulo Gallegos, Aquiles Nazoa y Ramón Palomares; así como títulos más recientes de escritores como Jorge Rodríguez Gómez, Miguel Ángel Pérez Pirela, Benito Yrady y Cósimo Mandrillo. Además se incluyeron trabajos de autores venezolanos con ascendencia árabe como Wafi Salih y Tarek William Saab.
Durante la actividad, en la que participaron los autores venezolanos Carmen Bohórquez, Luis Britto García y Antonio Trujillo, se realizó la lectura en árabe de algunos pasajes de la poesía de este último por parte de estudiantes de la Facultad de Letras.
Al respecto de la donación Mami expresó su agradecimiento a la delegación venezolana, encabezada por el viceministro Raúl Cazal, y resaltó que los trabajos entregados a la facultad serían un valioso recurso en la profundización del trabajo de los estudiantes de esa universidad.
Venezuela y Túnez, hermanados por el libro
Durante la conferencia ‘El libro y la lectura en 25 años de Revolución Bolivariana’, el viceministro Cazal resaltó el trabajo que el Gobierno Bolivariano ha realizado en torno al tema del libro y la lectura. Además de puntualizar algunos momentos clave en la gestión gubernamental respecto a este tema, insistió en el compromiso del presidente Nicolás Maduro en mantener el trabajo en este sector.
En ese mismo espíritu se llevó a cabo una reunión entre Cazal y varios representantes del sector del libro de Túnez. Durante el encuentro con Mohamed El Kadri, director general de la feria; Mohamed Elkadhi, presidente de Programación Cultural de la feria y Samir Shimi, el viceministro recordó que las relaciones entre los países del Magreb se fortalecieron durante la presidencia del Comandante Hugo Chávez Frías, y “son relaciones cuya importancia estratégica son vitales para América Latina, esto lo entiende el Gobierno Bolivariano y el presidente Nicolás Maduro”.
El Kadri por su parte expresó la satisfacción que le trajo la participación de Venezuela, como único representante del continente americano, en la feria tunecina. Durante la reunión se evaluaron posibles proyectos en conjunto en lo relativo al sector del libro en ambos países.
“Son más las cosas que nos unen, que aquellas que nos separan, debemos trabajar en conjunto para hacer que cada día esas cosas que nos separan sean menos”, afirmó.
En un esfuerzo por visibilizar la intersección entre el cine y el ecofeminismo, la escritora colombovenezolana Aminta Beleño presentó su libro “Cine en clave ecofeminista: Apuesta por despatriarcalizar y decolonizar la mirada” en la 37.ª Feria Internacional del Libro de Bogotá (FilBo).
El libro de Beleño, editado por Trinchera, es una investigación que destaca cómo este movimiento ha permeado diversas expresiones cinematográficas, desde producciones de alta factura hasta cine popular y de bajo presupuesto.
La obra, compuesta por seis capítulos, ofrece un análisis profundo que abarca películas de más de 30 países, incluyendo Colombia y Venezuela, así como de la extinta Unión Soviética.
“El cine no solo refleja realidades, sino que tiene el poder de transformar miradas y narrativas en la lucha por la descolonización y la despatriarcalización”, destacó la autora.
Uno de los capítulos se dedica a explicar el ecofeminismo, sus orígenes y su relevancia en la transformación de las narrativas sociales. El libro argumenta que el cine es una herramienta crucial en la lucha por la descolonización y la despatriarcalización, proporcionando un espacio para la reflexión y el cambio.
“El ecofeminismo ha sido una práctica del instinto, una unión de las luchas de las mujeres por liberarse de la violencia patriarcal y defender la naturaleza”, resaltó Beleño.
Además, se presenta un análisis fílmico de tres géneros: documental, ficción y animación, lo que permite explorar cómo estas narrativas han sido utilizadas por movimientos sociales para reivindicar la defensa de la naturaleza y la lucha contra la violencia patriarcal.
El cine en clave ecofeminista es una obra de carácter colectivo y formativo que busca reivindicar el ecofeminismo como una práctica social e intelectual. Esta investigación pone de manifiesto la importancia de las luchas de las mujeres en la defensa de la naturaleza y la libertad frente a la violencia patriarcal.
“Aunque el ecofeminismo no siempre ha sido teóricamente consciente, su práctica ha sido una respuesta instintiva a las injusticias que viven las mujeres y la naturaleza”, concluyó la escritora.
A propósito de la presentación de este libro en la FilBo, acompañaron a Beleño durante la actividad Alma Rodríguez, protagonista de la película Matrioshka, que se estrenará en las salas de cine colombianas a partir del 25 de mayo, e Ingrid Obando, promotora cultural y educadora.
Matrioshka, una película que hace alusión a la herencia femenina a través de tres generaciones de mujeres, refleja las vivencias de mujeres en un país en guerra y su lucha por enfrentar el dolor y el miedo acumulados a lo largo de los años.
La historia de América Latina en torno a la independencia y con atención especial en la figura del Libertador Simón Bolívar y los desafíos a los que tuvieron que enfrentarse las nuevas repúblicas a la hora de deshacerse de lo colonial fue tema de conversación en el stand de Venezuela en la 37.ª Feria Internacional del Libro de Bogotá (FilBo) con la presentación del libro Bolívar y Poder Moral: Proyecto para una República Popular, del escritor Manuel Carrero.
El texto, publicado por el Centro de Estudios Simón Bolívar, ahonda en las complejidades que representó organizar el nuevo orden en América, un continente que había atravesado tres siglos de dominación colonial, en el que reinaba la incertidumbre y la falta de experiencia en la autogobernanza.
Se añaden las influencias de la Revolución Francesa, la República de Haití y el modelo de Estados Unidos como pautas para las nuevas naciones de Hispanoamérica.
“La independencia no solo fue una emancipación, sino que desembocó en el desafío de la construcción de una identidad y de una sociedad que no conocíamos”, resaltó Carrero.
El autor abordó la interrogante fundamental que plantean los independentistas: el cómo educar a una gente que no conocía la libertad ni las bases de la República.
La historia que cuenta Carrero da cuenta de las gestas de los jóvenes patriotas que, a pesar de los obstáculos, pudieron salir victoriosos de las batallas decisivas como la de Boyacá.
La bravura y el afán de lucha de estos jóvenes, muchos de ellos en la flor de la vida, son mostrados como protagonistas de la lucha de la independencia y de la construcción de una nueva nación.
“Una batalla perdida fue el mismo paso para crear una República, pero, al mismo tiempo, era una llamada a recordar que apenas comenzaba la lucha”, agregó Carrero.
Bolívar y Poder Moral no es sólo una reflexión de la figura de Simón Bolívar, sino también un estímulo a pensar en las luchas que continuaron las nuevas republiquetas en su camino por la autonomía y el autogobierno.
La obra invita a los lectores a comprender la importancia de la historia en la formación de la identidad latinoamericana y en la búsqueda de un futuro más justo.
Un público entusiasta y ansioso por explorar las complejidades de la historia venezolana y latinoamericana acudió en la 37.ª Feria Internacional del Libro de Bogotá (FilBo 2025) a la presentación del libro La República Parricida: Fiesta, Memoria y Nación Venezuela 1830-1842, de Pedro Calzadilla, a cargo del reconocido escritor e investigador Manuel Carrero.
El libro de Calzadilla se convierte en un faro que ilumina la oscura realidad de la post-independencia en Venezuela, donde tras la liberación del dominio colonial español se comenzaron a buscar enemigos internos, lo que resultó en un ciclo de conflictos y guerras civiles.
Manuel Carrero destacó cómo Simón Bolívar, figura central en la lucha por la independencia, se convierte en un símbolo de la esperanza de un futuro soberano, pero también en un blanco para aquellos que se beneficiaron del caos y la división.
“Bolívar no solamente peleó por la independencia, sino también por la dignidad del pueblo y el país, su legado no puede ser olvidado”, dijo Carrero.
Gracias a la investigación de Calzadilla, puntualizó Carrero cómo las oligarquías venezolanas lucharon para silenciar la memoria de Bolívar, asustadas de que su legado de justicia social, de lucha en favor de la libertad o de lucha por la emancipación desbordara sus intereses.
“La historia ha sido manipulada para favorecer a unos pocos, pero es nuestra responsabilidad recordar y reivindicar a aquellos que lucharon por la libertad”, enfatizó Carrero durante su intervención.
El libro también aborda la grave situación económica que enfrentó el país tras las luchas por la independencia. Con un alto porcentaje de analfabetismo y un monopolio de la tierra en manos de latifundistas, la población, aunque legalmente libre, continuó viviendo en condiciones de servidumbre.
Carrero subrayó que “la libertad sin justicia es solo una ilusión. Necesitamos recordar el sacrificio de quienes lucharon por derechos fundamentales”.
Durante la presentación se invitó a los participantes a involucrarse de manera activa y fue generándose un diálogo bastante interesante en cuanto a las lecciones que pueden aprenderse del propio pasado, de temas como la necesidad de volver a hablar de cómo reconquistar la libertad a partir de la paz y la lucha social, de la utilidad de la memoria para hacer un futuro más justo.
“No podemos permitir que ocurra la repetición del hecho histórico, hemos de aprender de los errores, construir un verdadero camino hacia la libertad”, sostuvo Carrero.
El libro de Pedro Calzadilla es una obra histórica que también se convierte en una texto para movilizar hacia las nuevas generaciones la posibilidad de entender la libertad de una forma más amplia, la necesidad de la justicia social.
En un mundo donde la historia puede ser manipulada, La República Parricida se erige como un recurso indispensable para entender no solo la historia de Venezuela, sino también la de otros países de América Latina que enfrentaron desafíos similares.
“No deberíamos permitir que vuelva a repetirse la historia. Debemos aprender de nuestros errores y forjar un camino hacia la verdadera libertad”, concluyó Carrero.
A veces las obras tienen coincidencias que revelan destinos. Estábamos en medio de la pandemia cuando se difundió la noticia que la escritora venezolana Sol Linares ganó el Premio Tristana de Novela Fantástica con la obra inédita No todos los cíclopes nacen ciegos.
Entre las coincidencias que podemos mencionar está que el premio tiene por nombre una novela de Benito Pérez Galdós, que luego Luis Buñuel convirtió en película, y a la que la novela de Linares hace guiños.
El primero es el tema de género, pero sin que sea una defensa o alegato, sino una historia que son muchas desde tiempos inmemorables.
“Toda vida humana, como la tierra sobre sus polos, gira sobre el pivote del acto de la reproducción de la especie; pero así como la cultura disimula este hecho, la literatura debe ofrecer una veladura semejante”, escribió Pérez Galdós a Leopoldo Alas, Clarín, que muy bien podría resumir a Tristana (1892).
También hay un guiño a Buñuel por su documental Las Hurdes, tierra sin pan (1933) en donde la extrema pobreza y la ignorancia sirvieron de estudio antropológico y muestra que el aislamiento de un pueblo termina por hacer del incesto moneda corriente.
“Una película siempre debe defender y comunicar indirectamente la idea de que vivimos en un mundo brutal, hipócrita e injusto”, opinó Luis Buñuel sobre el papel del cine en la sociedad.
La primera impresión que sobresale de la escritora Sol Linares es que la “frescura” y “madurez” que resaltó el jurado en su veredicto del premio Alba (2010) cuando ganó con la novela Percusión y tomates, en No todos los cíclopes nacen ciegos (Menoscuarto Ediciones, 2022) queda la madurez como narradora con una profunda voz poética que le da fuerza a los diferentes significados que pueda tener una acción o suceso.
Linares no tiene apuros y plantea un solo tema con sus diferentes aristas o enfoques que a saber son lo afectivo y la violencia, específicamente la violencia familiar y de género —omite las guerras, invasiones—; y hace énfasis en la historia fundada con mitos, en donde la literatura y sus dioses occidentales son vistos con una mirada comprensiva y sin tanto horror.
En No todos los cíclopes nacen ciegos se logra conjugar ciencia con fantasía para mostrarnos que aún cuando la vida es circunstancial, tiene una historia que aunque se quiera ocultar, desaparecer, porque no se quiere hablar de ello por las diferentes razones que impone la ignorancia, nuestros ascendientes están allí, en nuestro ADN que siempre tiene algo que decir. Es otra escritura de nuestro pasado y, ¿por qué no?, sueños.
Pudo haber sido un policial, pero la fantasía trasciende el sortilegio necesario para entregarse a otras miradas, otras percepciones de la vida. Hay muertes, pero no asesinatos. Torturas físicas y psicológicas que transitan el tiempo.
Es la búsqueda para la resolución de dudas y miedos que va a contramano de Howard Phillips Lovecraft: “Estoy tan harto de la humanidad y del mundo que nada logra interesarme a no ser que incluya, por lo menos, dos crímenes por página, o que trate de horrores innominados procedentes de espacios exteriores”.
Sol Linares está abierta a lo desconocido, pero sobre todo, a lo que es diferente, a lo que alumbra. ¿Cuántas veces nos hemos hecho la pregunta de qué es lo normal? Quien no se hace esta interrogante está más cerca de los supremacistas que exterminan pueblos bajo la creencia que son un pueblo elegido y que terminan siendo peor que una pandemia.
La diversidad está en la riqueza del lenguaje que va más allá de las lenguas, de las historias que se cruzan, del ADN y la sangre, de los días y las noches que tienen luz propia y que hacen que las personas —en este caso, los personajes— se transformen y defiendan una causa, por más pequeña que esta sea, pero causa al fin.
Sol Linares muestra en No todos los cíclopes nacen ciegos una cara amable de la herencia de los mitos para explicar literariamente la realidad y los miedos a través de la fantasía y la ciencia. No todo está perdido, viene a ofrecer un corazón, como reza la canción de Fito Páez.